Puesta a punto de la piel para el otoño. En este reportaje para Telva, que firma la periodista Luisa Valerio, os lo cuento.
Si estas vacaciones nos hemos descuidado un poco, podemos someternos a tratamientos intensivos para recuperar la hidratación y el aspecto saludable de la piel, como peelings suaves y mesoterapia con ácido hialurónico, plasma rico en plaquetas o vitaminas. Las mascarillas de noche con efecto reparador e hidratante y antioxidantes por la mañana también son grandes aliados en estos casos de “emergencia”.
En esta época la piel puede dar sensación de más seca al ir perdiendo el bronceado por lo que hay que aumentar la hidratación, especifica para cada tipo de piel. Es también habitual ver pequeñas recaídas de acné, ya que la epidermis se hace mas gruesa ante la exposición solar favoreciendo la aparición de comedones. Podemos anticiparnos a ello, con exfoliación suave y productos de uso nocturno con ingredientes específicos (e.g., ácido salicílico, ácido retinoico, ácido glicólico, etc.). Las personas con tendencia a manchas pueden verlas acentuadas y por ello solemos recomendar volver a emplear cremas con principios activos despigmentantes suaves por la noche (como ácido kojico, ácido retinoico, arbutina, ácido azelaico, hidroquinona...), sin olvidarnos de seguir con el protector solar diario por la mañana.
La cosmética es el tratamiento de cabecera que nos ayuda a cuidar nuestra piel en casa. Dada la gran oferta de productos existente, siempre recomiendo asesoramiento por un especialista, de esta forma ahorramos tiempo y dinero. Además, lo que funciona para mí, puede no funcionar para mi amiga.
También aconsejo acompañar las cremas con tratamientos de cabina y técnicas específicas en la Consulta Dermatológica, como mesoterapia de plasma rico en plaquetas, administración de vitaminas o ácido hialurónico, luz pulsada, láser o peelings. Todo de forma personalizada y en función de las necesidades de cada paciente.
Os dejo un fragmento del artículo elaborado por Luisa.
Esto es lo que deberías hacer cuanto antes para recuperar la salud de tu piel en otoño
Un mayor número de horas expuestos a la radiación solar, altas temperaturas, agua con cloro, sal del mar, viento, aire acondicionado... Durante el periodo estival la piel ha estado sometida a numerosas agresiones y es en esta época cuando empiezan a percibirse las consecuencias. El otoño es la estación ideal para recuperar la piel de los estragos del verano y el momento perfecto para realizar una puesta a punto de la piel, que puede haber sido dañada, y llevar a cabo una autoexploración y en caso necesario acudir a un especialista para una valoración dermatológica, según aconseja la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).
Aunque lo principal para evitar la acción nociva en la piel del periodo veraniego "es hidratar a diario tras la jornada de playa, montaña, etc. y aplicar un buen filtro solar por la mañana, renovándolo a lo largo del día, si no se han seguido estas sencillas pautas, el efecto 'saludable' que nos aporta inicialmente el bronceado, va a ser muy poco duradero, dando paso a una piel con pigmentaciones irregulares, opaca (sin brillo) y seca", asegura Cristina García Millán, miembro de la AEDV y doctora en el grupo de Dermatología Pedro Jaén.
Los efectos menos deseados
Las consecuencias más comunes y poco deseadas que se suelen observar en la piel tras el periodo estival, aunque depende de la edad y el tipo de piel, son deshidratación, recaídas de acné, manchas, formación de arrugas, flacidez cutánea, alteraciones de la pigmentación... "En algunos pacientes la piel puede verse más seca, tras el bronceado veraniego, por lo que hay que aumentar la hidratación, específica para cada tipo de piel", aconseja García Millán.
Mientras que "las personas con tendencia a manchas pueden ver estas acentuadas, sobre todo cuando se pierde el bronceado de la piel no manchada. Para ello solemos recomendar emplear cremas con principios activos despigmentantes suaves por la noche (ácido kojico, ácido retinoíco, arbutina, ácido azelaico, hidroquinona...), sin olvidarnos de seguir con el protector solar diario por la mañana", continúa la doctora.
En cuanto a las pequeñas recaídas de acné se debe a que "la epidermis se hace más gruesa de forma natural ante la exposición solar, y al cesar el verano, aparecen más lesiones de acné. Podemos anticiparnos a ello, con exfoliación suave y productos de uso nocturno con ingredientes específicos (ácido salicílico, ácido retinoíco, ácido glicólico)", explica la doctora.
Por otro lado, aunque "el bronceado se pierde de forma gradual, según las células de la epidermis que van siendo renovadas a lo largo de un proceso que dura en torno a 28 días, "si no se ha obtenido acompañándolo de hidratación diaria -que ayuda a mantener la cohesión celular y la barrera natural de la piel- y filtro solar (que evita que las células sufran daños), la duración del efecto moreno será menor y además podemos observar el típico pelado", expresa Millán, que afirma que no es más que el reflejo de un daño en nuestra piel, que se descama de forma irregular tras un exceso de radiación solar. "Es aún muy frecuente pensar que la piel roja se convierte en moreno, y así es, pero se trata de una quemadura leve, por lo que el moreno será muy poco duradero, además de poco saludable", sigue la doctora.
La piel más afectada habitualmente por los estragos del verano suele ser la del escote y el cuello al tratarse de zonas mucho más expuestas a la radiación solar. "El sombrero nos protege la cara, mientras que estas zonas dejan de estar protegidas. El dorso de las manos y los labios también son zonas que suelen verse afectadas tanto por el sol como por la deshidratación secundaria a baños o actividades al aire libre", dice García Millán.
Algunas soluciones
Según la especialista, si durante las vacaciones nos hemos descuidado un poco o queremos preparar de forma idónea la piel para el otoño existen varias opciones con buenos resultados como "aumentar la hidratación para fortalecer la barrera cutánea, una exfoliación suave, incrementar la ingesta de antioxidantes... En caso de necesitar tratamientos específicos se aconseja acudir al especialista, que puede proponer en función del estado de la piel, mesoterapia con vitaminas, ácido hialurónico, plasma rico en plaquetas, despigmentantes, luz pulsada, láser, peelings...".
Pero siempre bajo el asesoramiento de un especialista, como explica la doctora, ya que "de esta forma se ahorra tiempo y dinero, puesto que lo que funciona para mí, puede no funcionar para mi amiga, por ejemplo". En este sentido los dermatólogos pueden recomendar cuidados cosméticos y tratamientos específicos de forma personalizada y en función de las necesidades de cada paciente.
"En este momento en el que existe una gran demanda de tratamientos y cuidados para la piel, así como una gran avalancha de información y recomendaciones de todo tipo (no siendo todas veraces ni de calidad) creo que es importante destacar la figura del dermatólogo, ya que somos los especialistas en piel sana y piel enferma y sabemos cómo combinar cosmética, tratamientos y fármacos si son necesarios. El paciente y consumidor debe exigir rigor en este sentido.", manifiesta García Millán.