Fotoprotección
Debe ser un gesto habitual, sea cual sea la estación en la que nos encontremos. En invierno podemos optar por texturas más ricas y en verano más ligeras. Las fórmulas con color son muy útiles para obtener de forma natural el deseado “efecto buena cara” que necesitamos en esta época del año.
Protegernos de la Polución
No debemos empezar el nuevo año sin olvidar que la polución de las grandes ciudades acelera el proceso fisiológico del envejecimiento. Por este motivo un sérum con ingredientes capaces de combatir los efectos nocivos de la polución será un gran aliado, durante todo el año
Hidratación
La hidratación de la piel de la cara es un elemento fundamental en la rutina diaria y no debe quedar en un segundo plano, ni destinada únicamente a las pieles tradicionalmente secas. La hidratación diaria, es un pilar adicional de los tratamientos antiedad y mejora la salud de la piel.
Una higiene para cada tipo de piel
Todos los tipos de piel precisan una limpieza diaria. Aquellas con tendencia grasa o acneica precisarán de geles o espumas con principios activos seboreguladores y las pieles sensibles deben utilizar productos libres de tensioactivos e irritantes.
Manchas a raya
Los tratamientos destinados a aclarar las manchas que aparecen durante el verano o después de los embarazos, se intensifican en invierno, de cara a poder lucir un tono uniforme durante la primavera y el verano. Para ello podemos optar por despigmentantes de distinta composición y combinarlo con tratamientos con láser o luz pulsada.