Los hábitos saludables en relación a la exposición solar, son cada vez mas constantes en la sociedad, pero aún nos queda mucho por hacer. Según los datos estadísticos disponibles, hemos recibido a los 18 años aproximadamente un 25% de la radiación solar que nuestra piel puede soportar. Este dato sigue siendo alarmante, dado que los efectos carcinogénicos de la radiación ultravioleta son mayores durante la infancia, de forma que los adultos que se han quemado siendo niños, tienen mas riesgo de padecer cáncer de piel pasados los años.
En la consulta de Dermatología Infantil, los padres nos preguntan a menudo acerca de la forma mas adecuada de proteger del sol a sus niños, que varia según la edad. Los dermatólogos coincidimos en que los bebes menores de un año, no deben exponerse de forma directa al sol y deben usar siempre medidas físicas como gorro y camiseta en caso de que pasen algún tiempo en zonas donde la radiación solar es intensa, como playas o piscinas. En estos casos nunca deben exponerse entre las 12:00 y las 16:00 y siempre deben permanecer a la sombra el mayor tiempo posible.
¿Qué protector solar se debe usar para los niños?
En cuanto a las cremas que podemos utilizar, en los últimos años la oferta de protectores solares con indicación pediátrica ha aumentado considerablemente.
Siempre y sin excepción, aconsejamos utilizar un protector solar con un índice de protección solar 50+ en todos los pacientes pediátricos. En ocasiones, algunos padres aplican índices menores debido a que la piel de sus hijos es más morena. El fototipo no es un motivo para reducir el índice de protección, ya que los efectos dañinos sobre el ADN se dan en todos los tipos de piel. Nuestra principal motivación es evitar las quemaduras solares, ya que existe una relación directa entre la gravedad de las quemaduras solares durante la infancia y la aparición de melanoma. Pero incluso en pieles que no se queman fácilmente no debemos descuidar el índice de protección.
Protectores solares formulados para niños
Los protectores solares formulados para niños pueden ser físicos o químicos y una novedad con la que contamos recientemente es la fotoprotección oral, que se ha incorporado como coadyuvente en la fotoprotección infantil.
Los filtros físicos contienen partículas minerales (Oxido de Zinc o de Titanio) y ejercen su efecto protector reflejando la radiación solar. No penetran en la piel, y su capacidad irritante es menor por lo que son los que principalmente aconsejamos en bebés y niños pequeños (de 6 meses a 3 años) así como en niños atópicos, dado que no pueden irritar la piel. Es cierto, que ya disponemos en el mercado de formulas especiales para atópicos, pero un filtro físico siempre será una buena opción en caso de que no podamos disponer de una crema para pieles atópicas.
Otra característica de estas formulaciones es que permanecen en la piel durante más tiempo, por lo que son más resistentes a la fricción y al agua. Algunas fórmulas pueden resultar demasiado densa incluso podrían rascar ciertas pieles muy reactivas. En estos casos podemos aplicar una crema emoliente 30 minutos antes del protector solar. De esta forma minimizaremos el efecto secante del filtro sin diluir su capacidad protectora.
En cuanto a las propiedades cosméticas de estos filtros físicos, cada vez podemos encontrar en el mercado productos mejores y texturas más ligeras, dado que las partículas minerales que componen estos filtros son cada vez de menor tamaño.
Los filtros químicos de amplio espectro suelen estar compuestos por partículas orgánicas (avobenzona y oxibenzona) y en mayor o menor medida añaden partículas minerales. Estos compuestos absorben la radiación ultravioleta debido a su estructura molecular y se degradan con el tiempo de exposición solar.
Podemos decir que los filtros físicos actúan como un escudo mientras que los filtros químicos se absorben por la piel.
¿Porque no se debe emplear cremas solares en menores de 6 meses?
Por este motivo no debemos emplear cremas solares en bebes menores de 6 meses. En estos pacientes las medidas físicas como sombrillas y prendas de vestir deberían ser suficiente, dado que la exposición solar directa está contraindicada en lactantes menores de esta edad.
Como norma general, los dermatólogos infantiles solemos recomendar filtros físicos en bebés, ya que las fórmulas minerales reflejan mejor la luz, no se absorben y tienden a permanecer durante más tiempo sobre la piel, ejerciendo un efecto protector más completo y adecuado en los lactantes. En niños mayores de 3 años podemos utilizar otras fórmulas pero teniendo en cuenta que los atópicos pueden no tolerarlas, incluso empeorar por lo que en este grupo de pacientes emplearemos filtros físicos en todas las edades, de forma preferente.
La fotoprotección oral no sustituye en ningún caso a la crema solar
En cuanto a la fotoprotección oral, debemos resaltar que no sustituye en ningún caso a la crema solar. Las formulas orales son nutricosméticos con capacidad antioxidante, e inmunoprotectora, de forma que van a reducir de forma considerable los efectos nocivos del sol sobre la piel. Los dermatólogos lo empleamos como complemento en pieles sensibles y fototipos claros (piel clara, ojos azules y pelo rubio) para reducir el riesgo de quemaduras.